2.3. Los reinos cristianos en la Baja Edad Media (siglos XIV y XV): crisis agraria y demográfica; las tensiones sociales; la diferente evolución y organización política de las coronas de Castilla, Aragón y Navarra.

A) CRISIS AGRARIA Y DEMOGRÁFICA

El siglo XIV fue un siglo de crisis generalizada en toda Europa: 

- Crisis demográfica: provocada por la disminución de la población tras las sucesivas epidemias de Peste Negra o bubónica originaria de Asia y llegada desde el Mar Negro a través de las pulgas de las ratas. La primera epidemia fue la más virulenta de todas y llegó desde Baleares a todo el Levante (en 1340 muere de esta enfermedad Alfonso XI), 1363 y 1371. 

La población fue víctima de las carencias en alimentación, la consecuente falta de defensas, la escasa higiene y la falta de medicamentos. Las malas cosechas provocaron la escasez de trigo, el aumento de los precios y las "hambrunas". En Cataluña la población disminuyó casi un 40%

La consecuencias fueron:

• Una elevada mortalidad.
• Emigraciones del campo a la ciudad ya que allí había más amparo, aunque era un arma de doble filo ya que el contagio era mayor.
• El despoblamiento de muchas zonas por las dos consecuencias que acabamos de citar.

- Crisis económica y social: la población creció durante el siglo XIII y principios del XIV por encima de la producción agraria lo que trajo, como consecuencia, una crisis de subsistencia. La poca producción agraria se debía a una serie de malas cosechas lo que trajo como consecuencia la escasez de comercio y la ruina de muchos artesanos. 

- Rebeliones antiseñoriales: los nobles verán resentidas sus rentas y para recuperarlas tratarán de presionar al rey y a sus siervos, la consecuencia serán las rebeliones campesinas como la "irmandiña" en Galicia que necesitó de la unión de los nobles para acabar con ella. 
En Cataluña los nobles también endurecerán las condiciones laborales de los campesinos o payeses y se les aplicará un pago llamado "remensa" si quieren abandonar el señorío, ésto provocará las rebeliones de los mismos que se verán apoyados por la monarquía para disminuir el poder de los nobles. 

También en Barcelona habrá enfrentamientos entre una oligarquía urbana llamada "La Biga" y pequeños artesanos y comerciantes, "La Busca". Los dos grupos querrán gobernar la ciudad, también éstos últimos serán apoyados por el rey con los mismo propósitos de debilitar a la nobleza.

Pronto comenzaron también los conflictos sociales reflejados en asaltos a juderías catalanas en 1348, "progromos", por sus riquezas y por ser prestamistas, incluso de los reyes. Se les acusó de haber provocado la peste negra, corrompiendo el aire y las aguas. En 1391 los ataques continuaron en Sevilla  y se extenderán hasta Castilla, muchos judíos murieron y otros se convirtieron al cristianismo, serán los conversos.

En los siglos XVII y XVIII, algunos doctores utilizaban máscaras que parecían picos de aves llenas de artículos aromáticos. Las máscaras eran diseñadas para protegerlos del aire podrido, el cual  era vista como la causa de la infección.

B) LA DIFERENTE EVOLUCIÓN POLÍTICA DE LAS CORONAS DE CASTILLA, ARAGÓN Y NAVARRA.

En la Baja Edad Media se inicia el fortalecimiento del poder real que conducirá a las monarquías absolutas de la Edad Moderna. Pero este procedimiento estuvo lleno de dificultades porque la nobleza y el clero chocaban con los intereses de los reyes. 

• La Guerra civil en Castilla la nueva dinastía Trastámara (1366-1369) : Pedro I el Cruel (1350-1369) era hijo de Alfonso XI y María de Portugal y estaba decidido a fortalecer su poder frente a los nobles por lo que empezó a gobernar al margen de ellos. Los nobles se organizaron entonces entorno a los hermanastros del rey (los hijos bastardos de Alfonso XI con Leonor de Guzmán). Uno de ellos, Enrique de Trastámara, encabezó la rebelión que acabaría con el trono de Pedro I. En 1369 es asesinado Pedro I en el castillo de Montiel apuñalado por su propio hermanastro. El triunfo coronaría a Enrique como II y los Trastámara llegarán a Castilla con la ayuda de la nobleza y por tanto en deuda con ella.

Estatua orante de Pedro I en el Museo Arqueológico Nacional

• El compromiso de Caspe (1412): muerto sin heredero Martín I el Humano (1396-1410) se apoyan definitivamente dos candidaturas: la de Fernando de Trastámara (regente de la Corona de Castilla por la minoría de edad del rey, su sobrino Enrique III) y el conde de Urgel. La cuestión sucesoria se resolverá en el Compromiso de Caspe, en el que nueve compromisarios -tres por cada uno de los territorios de Cataluña, Aragón y Valencia-, eligieron a Fernando I de Trastámara sin necesidad de una guerra civil. En Castilla y Aragón reinarán la misma dinastía en diferentes ramas.

Acta notarial del compromiso

• La guerra civil en Navarra (1451-1461): fue un reino más orientado a Francia que hacia los reinos hispánicos (pertenecieron a este país de 1274 a 1328). La crisis llegó en el siglo XV, cuando tras la muerte de la reina doña Blanca, se disputaron el trono su esposo, el futuro Juan II de Aragón, y el hijo de ambos, Carlos, príncipe de Viana. El enfrentamiento padre e hijo fue una guerra civil que durará de 1451 a la extraña muerte (posiblemente por envenenamiento) de Carlos en 1461. Su hermanastro será el futuro Fernando el Católico.

• La guerra civil en Cataluña (1462-1472): fue un conflicto provocado por muchos factores como el enfrentamiento entre la monarquía y la oligarquía catalana; entre campesinos y señores feudales y entre comerciantes y artesanos en Barcelona. La guerra estalló con el rey Juan II (1458-1479) de firmes convicciones absolutistas. Finalmente Barcelona se rinde y se firma en 1472 la Capitulación de Pedralbes, en la que el rey fue conciliador con los vencidos. Cataluña quedaría arruinada.